Come From Away llegó al Teatro Maipo de la mano de Carla Calabrese en un intento casi desesperado, en los tiempos que corren, de mostrar al mundo que con empatía y amor desinteresado por el prójimo todo se logra.
Este show musical se estrenó en Broadway y nunca se imaginó que se iba a convertir en un musical de culto. De hecho, más allá de haber ganado un Tony por Mejor Musical, hoy se da en simultáneo en Londres, Nueva York y Argentina.
La historia es simple y absolutamente REAL. Todos recordamos el fatal ataque a las Torres Gemelas el 9 de septiembre del 2001. En ese momento se cancelaron todos los vuelos por el atentado. Los habitantes de Gander, una isla de Terranova en Canadá, recibieron y contuvieron a miles de pasajeros del mundo que fueron desviados. La historia ya está plasmada en este musical que es un éxito.
David Hein e Irene Sankoff, autores de la obra, con una sensibilidad a flor de piel fueron quienes empezaron a imaginar el musical y viajaron al pueblo a entrevistar a las personas que vivieron este brutal acontecimiento. Eso devino a COME FROM AWAY.
Llegamos al Teatro Maipo, eran las 17.45, antes de una función de viernes. Nos metimos en el camarín de un seleccionado del Teatro Musical. Nos recibe Carla Calabrese, la directora de The Stage Company, que comparte su camarín con su amiga Mela Lenoir. Además, hace poco tiempo fueron grandes ganadores de Los Premios Hugo, entonces doble festejo.
Un recorrido único por el adorable Teatro Maipo, con hacedores del género, Marisol Otero, Sebastián Holz, Silvina Nieto, Gaby Bevaqcua, Manu Victoria y la vuelta al musical , después de muchos años, de Edgardo Moreira.
